A la hora de planificar un viaje, no hay momento que disfrute más que el de sacar a relucir mi to do / to go list para poner en práctica en el lugar de destino. Ese despliegue de espacios lejanos, soñados y en ese momento un poquito más accesibles... me encanta! En esas estaba ayer, mientras organizábamos nuestra visita a New York, y me reencontré con este Hotel. Amor a primera primera vista. A cualquier vista, en realidad.
1 Hotel, Central Park, me transmite autenticidad por encima de todo. El tacto detrás de cada objeto, su combinación equilibrada de distintos materiales -todos naturales, todos desnudos-, su carácter ecológico sin pretensiones... Mucho encanto en pleno corazón de Manhattan. Informándome un poco más, aprendí que el diseño es obra de AvroKO, que el amor por la naturaleza -´´como ecosistema libre, al que hay que dedicar tiempo y paciencia para que ella misma encuentre, después, su camino´´- fue el hilo conductor del proyecto, y que el adjetivo ecológico, en este caso, se ajusta realmente bien.
El punto de partida, fue tan sencillo como desnudar el edificio industrial. Llegar a su esencia. Estructura vista y sinceridad constructiva como principio de todo. A partir de ahí, una fiesta para los sentidos! La fachada de hiedra y las dos puertas construidas a partir de 16.000 leños dan paso al lobby, que sin duda -al menos vía imágenes- es mi estancia preferida. Los materiales, elegidos con mucho criterio, y muchos de ellos reciclados: madera, ladrillo, piedra y vidrio local. Los jardines colgantes Kodekama, suspendidos en este caso de los techos de roble, y las raices de un arce a modo de escultura, subrayan los espacios comunes. Y para conservar energía...en la oscuridad de la noche las luces del lobby se apagan para ser sustituidas por velas. Más romanticismo, por favor? :)
Queda oficialmente añadido en el blog otro precioso ejemplo de espacios inspiradores! Disfrutad!
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