Será porque la Navidad se acerca y esa época del año no entiende de otros protagonistas... O quizá porque están empezando a tener un huequito especial en nuestras vidas... pero lo cierto es que no me he podido resistir a dedicar el post de hoy a los mas peques de la casa. Recuerdo que, siendo niñas, nos encantaba la idea de tener una habitación de juegos. No importaba lo reducido que se quedase el dormitorio compartido entre mi hermana y yo: el cuarto de al lado para montar las cocinitas o la casa de las barbies era sin duda nuestro refugio preferido!
